Juventud del país se sigue ahogando en la sangre de la violencia.

EL ESTUDIANTE LENDU NEWS

Violencia sigue arrebatando la vida y el futuro de  la juventud pobre de Honduras. 

En el país la violencia es el pan de cada día, todos los días llueven balas y terror en las puertas de los hogares obreros. En los últimos años los asesinatos, secuestros, tiroteos, se han convertido en experiencias cotidianas para  la juventud, quien es la que sufre estos sucesos.

En un país donde el acceso a la educación es casi nulo, donde la educación es privada y cada vez más precaria, donde ni la Secretaria de Educación, ni el gobierno se preocupan por educar a la juventud, donde oenegés como USAID se aseguren que la privatización de la educación avance a pasos de gigante. Todos los factores se unen, -todas las esferas del dragon se juntan- para que la juventud en su mayoría no tengo acceso ni siquiera al derecho inalienable de la vida.

La juventud, en su desesperación causada por no poder educarse académicamente y progresar en la vida, (Durísima vida) les toca jugarse la suerte y entregar la vida en trabajos 'dignos' donde sufren explotados y ponen sus vidas en riesgo, y en muchos casos, la única opción es entrar a la 'mara' por que es lo único que ofrece el barrio, además de eso, es el único lugar donde encuentran refugio y una manera de sobrevivir.

El día de hoy (24.04.2021) le arrebatan la vida a un joven más, que se levantó como cualquier otro día a trabajar de ayudante de rapidito, despidiéndose con un beso de amor de su madre, salió sin saber que sería asesinado en horas de la tarde.... Es lamentable que a la juventud del país se les sea arrebatado su derecho a la educación y desarrollo, y peor aún, que por esa causa, se les sea arrebatada la vida por una violencia que en nada preocupa ni al gobierno, ni a todas las oenegés imperiales.

La víctima de un país en crisis, respondía al nombre de: Cesar Eduardo Pérez....