Centros educativos que sufrieron inundaciones siguen en el abandono por parte del Estado.

Gobierno dejó abandonados colegios inundados de la zona norte. 

Como es de conocimiento publico, el municipio de La Lima y zonas aledañas fue uno de los sectores más devastado por los huracanes ETA e IOTA, lugar donde las familias trabajadoras tuvieron que soportar perdidas totales de sus bienes, poco a poco los miles de damnificados volvieron a sus hogares (o lo que quedaba de ellos), y les ha tocado ir reconstruyendo su vida 'normal', desde cero,  pero los centros educativos que sufrieron las inundaciones siguen en el abandono total por parte del Estado.

Hoy por hoy ningún colegio o escuela ha sido ni siquiera visitada por  las autoridades educativas para determinar su estado y evaluar algún  proceso de reestructuración o mantenimiento. Muchos centros educativos desde su fundación nunca han sido reconstruidos, tampoco se destina presupuesto para el merecido mantenimiento de estos. Esta vez, por si el descaro fuera poco, el Estado de Honduras pretende que sean los padres/madres de familia los que costeen la reparación de los centros educativos destruidos por los huracanes. 

Las escuela y colegios que fueron limpiados en La Lima, fue gracias una labor del Movimiento Estudiantil Lenín Dubón que convocó a los estudiantes a sumarse a la labor de limpieza, de la mano de docentes y de padres/madres de familia. Claro ejemplo, el Instituto Alfonso Hernández Cordova de la colonia Ciudad Planeta.
 Posteriormente, el Estado pidió ''limpiar'' (Cuando el trabajo ya estaba hecho), los centros educativos pero para utilizarlos como centros electorales el pasado14 de marzo.

La función del Estado debe ir más allá de solo pagarle salarios de hambre a los docentes, el mantenimiento, la modernización y la creación de nuevos espacios en los centros educativos es un deber del Estado, cuando el Estado de Honduras inició a limitar el presupuesto que destina a educación (Después del golpe de Estado de 2009), fue recayendo sobre el hombro de los padres/madres de familia el costo de los centros educativos, que implica desde pintar, hasta pagar aseadores. Esto se notó de forma descarada en la pasada crisis de los huracanes, todas las laminas que se cayeron, todas las paredes que se rajaron, todos los pupitres que arrastró la corriente, serán reparados con el dinero que se extraiga de los padres/madres de familia.